¿Realmente se puede, pronunciando el nombre de Buda, eliminar todo nuestro karma negativo?

Queridos bodhisatvas, bienvenidos a este lugar para recibir las enseñanzas de los tres vehículos del Bodi (la sabiduría) sobre la serie de preguntas.

 

Hoy vamos a hablar sobre si pronunciando el nombre de Buda aunque sea sólo una vez podemos eliminar todos nuestros pecados, que son cómo las arenas del inmenso río.

 

Hay mucha gente que sobre este tema siempre tiene la misma pregunta: ¿realmente se puede, pronunciando el nombre de Buda, eliminar todo nuestro karma negativo, que es tan grande cómo las arenas del inmenso río? ¿Solamente pronunciando el nombre de un Buda? ¿Quiere decirse que tan solo pronunciando el nombre de un Buda, uno puede acabar todas sus prácticas de esta vida? ¿Así podemos gozar la vida?

 

Cómo hoy se hacen este tipo de preguntas, aclararé sobre este tema: la eliminación de todo nuestro karma negativo, que es tan grande cómo las arenas del río,  a través de la práctica de la repetición del nombre del Buda (念佛).

 

Primero tenemos que pensar que nuestro karma negativo de nuestra vida pasada y actual es realmente inmenso, inconmensurable como las arenas de un gran río.

Ahora bien en el Avatamsaka Sutra, el Buda dice: tenemos tanto karma negativo, tan grande, como el vasto espacio interestelar. Cuando uno lee o escucha esta parte del Avatamsaka Sutra, lo primero que le sucede a uno, es que se le nubla el corazón, y se pregunta ¿realmente es así?, ¿tan grande es nuestro karma negativo?  Más tarde averiguaremos lo que dice otro Sutra;  en el Sutra Ksitigharba, el bodhisatva Ksitigharba dice:

“Yo veo a los hombres de este mundo que en cualquier pensamiento, palabra o acción, siempre están cometiendo distintos tipos de karmas negativos. Y que aunque tienen un poco de karma positivo, enseguida vuelven al mal camino que genera los distintos tipos de karma negativos”.

En el sutra de Ksitigharba en el capítulo dos, podemos ver esto. El origen de todo este mal karma es debido a nuestro pensamiento y la acción correspondiente a ese pensamiento.

Si observamos en detalle nuestro comportamiento, palabra y pensamiento, podremos ver que con nuestro cuerpo es que podemos realizar en el plano físico nuestras acciones, que con nuestra lengua, producimos el karma verbal y que nuestro pensamiento es producido por nuestro cerebro que no deja nunca de pensar. Quiere decirse que no dejamos de producir karma. Sin embargo, la persona común no sabe que está generando karma.

Ahora bien, con las conferencias pasadas, seguro que ustedes saben ya qué es causa kármica y condición necesaria kármica y fruto kármico. Todo esto  hace que tengamos los distintos tipos de karma en nuestra vida actual y luego según lo que decidimos en nuestro corazón, cómo reaccionar a estos karmas, a su vez, será causa de nuestros futuros karmas.

Siguiendo con lo anterior, las personas comunes como no son Budas, no son conscientes de sus infinitas vidas pasadas y los distintos karmas negativos  que cometieron en ellas y ni siquiera son conscientes de todo el proceso mental generador de los distintos karmas que producen a cada instante en su propia vida diaria. Por eso, si la persona no practica correctamente es muy difícil que pueda ser consciente de todos sus hábitos mentales que son la causa de sus distintos frutos kármicos, y no podrá corregirlos y por consecuencia seguirá girando en esa rueda de mal karma.

Dentro de todos estos distintos tipos de hábitos mentales, que se los puede considerar, como obstáculos en el camino de nuestra práctica budista, el mayor obstáculo es ese sentido de nuestro ´´falso YO´´ (nuestro ego).

Sobre el ego, hoy no vamos a tener tiempo de profundizar. Pero les puedo decir hoy, que esta noción del ego surge del no tener noción de nuestro verdadero yo. Y si quieren tener el verdadero concepto sobre el “verdadero yo”,  les aconsejo que estudien el Agama Sutra.

Si ustedes tienen problemas para entender el Agama Sutra, pueden escribir a nuestra asociación, donde les podemos dar un texto con la explicación de dicho sutra. De esta manera ustedes podrán tener un concepto claro sobre qué es el concepto del yo, qué es el ego,  y así podrán saber el por qué de sus hábitos y cómo funciona todo este proceso.

También con nuestros hábitos, podemos encontrar muchos obstáculos en la vida.

 Y así nosotros mismos con nuestra propia forma de pensar llena de pensamientos equivocados, negativos, formamos nuestros propios obstáculos en nuestra vida, generándonos a nosotros mismos nuestras propias molestias.

Por eso Ksitigarbha Bodhistava en su Sutra, dice que la gente de este mundo, continuamente con su pensamiento, está generando mal karma; es muy poco el karma positivo que pueden generar.

 

Esto no es un chiste, sino que realmente es así. Todo ese bagaje de pensamientos que son consecuencias de las acciones de nuestra vidas pasadas, pueden generar una mala afinidad con los otros seres, y con las personas; cuando ustedes llegan a su casa y reflexionan sobre lo sucedido con los demás, realmente se darán cuenta que es a causa de algún pensamiento negativo.

 Y si además tenemos un cierto sentido paranoico hacia los demás ¿cómo queremos así practicar Budismo?

Por eso un verdadero practicante debe darse cuenta de cómo surge ese pensamiento y de lo que puede causar kármicamente. Esto es lo que dice el sutra de Ksitigharba, que cualquier pensamiento, cualquier gesto está lleno de pecado.

Sin embargo en este mismo sutra, el bodhisatva Ksitigharba, lo que quiere, es aconsejarnos de que si tenemos una mala intención para con los demás, causará mal karma más tarde; también si tenemos una intención buena,  buenos pensamientos, podremos generar mucha afinidad con la gente.

Por ejemplo, dentro del Budismo, hablamos de los preceptos, aunque no tengamos los preceptos de un monje, o un bodhisatva, con sólo tener los preceptos de un laico budista esto ya hace que en nuestra mente se generen pensamientos positivos, que a su vez generan afinidad con los seres humanos y demás seres. Por eso es tan importante el poder mantener los preceptos.

Ahora, sabiendo todo esto podemos preguntarnos el por qué de la repetición del nombre de un Buda, puede eliminar todos nuestros karmas negativos que son inconmensurables como las arenas de un gran río.

Recién hemos explicado cómo un pensamiento puede desarrollar mucha afinidad con los demás, o muy mala afinidad; esto depende del tipo de pensamiento que generemos.

Por eso cuando pronunciamos el nombre de un Buda, seguramente que estamos generando pensamientos sanos. Y nuestras palabras son sinceras. Esto hace que podamos construir muy buena afinidad con los demás.

La práctica de la recitación del nombre de un Buda o bodhisatva, logra detener la sucesión de pensamientos negativos que darán como consecuencia frutos kármicos negativos.

También tenemos que decir, que el comportamiento del practicante desarrolla buena o mala afinidad según como sea éste.

Ahora vamos a profundizar lo que venimos diciendo, que la práctica de la recitación del nombre del Buda (念佛) puede eliminar nuestros innumerables karmas negativos como las arenas del gran río.

En el sutra Milindapanha Sutra,  aparece un monje llamado Nāgasena y un rey llamado Milinda. Este rey tiene muchas preguntas por realizar a este monje. Pero Nāgasena tiene mucha sabiduría y puede contestar cualquier pregunta que le pudiese hacer este rey.

El rey Milinda al ver la sabiduría de este monje y poder comprender sus enseñanzas, se volcó al Budismo.

Dentro de todas las preguntas que tenía el rey para hacerle al monje Nāgasena estaba la siguiente:

 

-Ustedes los Budistas dicen, que si la persona en el momento de su muerte, en el último suspiro, pronuncia el nombre de un Buda, a pesar de que tenga muy mal karma, puede renacer en una de las tierras puras de los Budas. Y yo no creo en eso.

Porque ustedes dicen que si uno mata a otra persona, cuando él  muere, tiene que caer en las vías inferiores.

Si ustedes dicen que tiene que caer en las vías inferiores, ¿por qué dicen que la gente al final de su vida, al pronunciar el nombre de un Buda puede ir a una de las Tierras Puras? ¡¡¡Eso no es lógico!!!

Entonces el monje Nāgasena le contesta con otra pregunta al rey:

-¿Usted qué piensa?  Si yo tiro una piedra pequeña al río, ¿ésta se hundirá o flotará?

A lo que el rey contesta:

-Por más que su piedra fuese muy pequeña, ésta se hundirá.

Nāgasena: -¿Y si tiraras miles de ellas al río o una piedra muy grande? ¿Ésta o éstas flotarían?

Milinda:- ¡¡¡Claro que no!!!

 

Nāgasena: -Y si yo pongo todas esas piedras en un barco, éstas, ¿se hundirían?

Rey: -Depende del tamaño del barco. Si el barco es muy grande, aunque lleve todas esas piedras, éste no se hundirá.

Monje: -Es así. Pero aunque si la piedra fuese muy pequeña o grande, si no tuviese este barco se hundiría.

 

Por eso, aunque el mal karma de los seres humanos  fuera solamente cómo esta pequeña piedra, si no tienen este barco (un Buda o bodhisatva) que los ayude, también se hundirán en el océano del Samsara.

 

El rey al escuchar las respuestas de este monje, quedó muy convencido y se convirtió al Budismo.

Por eso a través de esta historia, podemos comprender que el recitar el nombre de un Buda o bodhisatva es muy importante; además de poder eliminar nuestros malos pensamientos y de poder desarrollar afinidad para con los demás, también tendremos la ayuda de los Budas y bodhisatvas.

Sobre este tema hay gente que va a preguntar: ¿por qué ha de ayudarme el Buda o un bodhisatva? Pongámonos a pensar un poquito. Si a una persona que es buena, que tiene un buen corazón,  se le  pide una ayuda cualquiera, esta persona, ¿no nos ayudaría? Con más razón un bodhisatva que para llegar a serlo estuvo practicando incalculables millones de kalpas, los seis paramitas y ni hablar de un Buda que es más que un bodhisatva. Porque recuerden que un bodhisatva practica para ser un Buda. Todos ellos, recuerden también, que tienen una gran compasión hacia nosotros los seres humanos.

Por ejemplo Amitabha Buda (en sánscrito) o Amitofo (en chino): Amitofo, hace muchos kalpas atrás había realizado 48 votos que cumpliría para el bienestar de todos nosotros.

Entre esos votos está el que dice que si una persona en su última expiración, a pesar de que tenga un muy mal karma  (excepto las cinco o 10 malas acciones) si pronuncia su nombre, él con el poder que tiene por ser un Buda llevará a esta persona a su Tierra Pura del oeste, para que esta persona pueda practicar libremente las enseñanzas de Buda AMITOFO.

Recordemos que según la causa y condición necesaria más el fruto, cada uno de nosotros creamos y recibimos nuestro propio karma, nada es casualidad.

 

Y es muy difícil poder liberarnos de esos frutos kármicos.

Al recitar los nombres de Budas y Bodhisatvas, uno puede ir mejorando ese mal karma y así vida tras vida avanzar en la práctica; y evitar  temporalmente los malos frutos kármicos, y  caer en las tres vías inferiores.

Podemos imaginar que Amitofo tiene mucha fuerza y una gran compasión, para que la gente en este mundo, a pesar de su muy mal karma pueda entrar a la Tierra Pura del oeste.

De todo esto se desprende que cuando pedimos la ayuda de un Bodhisatva o Buda, seguramente  obtendremos su ayuda.

Hay gente que va a decir: yo por más que pida, parece que los Budas y Bodhisatvas están sordos, no tengo éxito en lo que pido.

Bueno vamos a hablar que es tener éxito realmente.

Todo depende de qué deseo tengamos. Por ejemplo si uno quiere sacarse la lotería, seguramente el Bodhisatva comprenderá que nuestro deseo nada tiene que ver con la sabiduría y el dharma,  para mejorar nuestra futura vida. Por eso cuando una persona piensa así, está eliminando su propio mérito y el bodhisatva en su sabiduría seguramente no nos ayudará. Por eso cuando uno pide, tiene que observar si lo que pide está en línea con el dharma. Si es así, seguramente el bodhisatva nos ayudará.

Dentro del Budismo, se han dado muchos casos en que las personas pidieron para poder entrar a practicar el Budismo, liberarse de los obstáculos que le impedían practicar y han tenido éxito. Y los que son verdaderos practicantes, seguro que han tenido estas experiencias.

Ahora bien, aunque el bodhisatva nos puede ayudar, uno también tiene que hacer el esfuerzo para que él nos ayude. Uno no puede pedir la ayuda y no hacer nada; ningún esfuerzo en pos del éxito. Uno tiene que poder observar si nuestro comportamiento es el adecuado, si estoy practicando seriamente o simplemente recito y luego doy riendas sueltas a mis sentidos y mi comportamiento no es el de un verdadero practicante ¿se entiende? Un verdadero practicante tiene que tener este tipo de pensamiento y observar continuamente su comportamiento y si es el adecuado para un verdadero practicante.

Por eso, el practicar la recitación del Buda (念佛), no significa que se elimine todo tipo de mal karma. Este concepto está equivocado. Porque si no podemos eliminar nuestros malos pensamientos, no podemos eliminar nuestro sufrimiento y nuestra molestia en la vida diaria; por más que recitemos, si al otro día no cambiamos nuestra forma de pensar, no tendremos ningún éxito.

También vamos a decir que hay gente que piensa que la práctica de recitar está relacionada solamente con el Buda Amitabha y su Tierra Pura.

Ahora voy a decirles a ustedes que según lo que entendemos de los Sutras Budistas, uno también puede recitar los nombres de los bodhisatvas como por ejemplo Avalokitesvara  (Kuan shi in pusa- 觀世音菩薩 en chino) , o del Buda Sakyamuni y esto no implica que uno esté practicando Budismo.

Si ustedes realmente practican Budismo, van a encontrar 48.ooo métodos y cada método no está separado del nombre del Buda. Porque cada método fue explicado por él.

Quiere decir que si seguimos el método del Buda paso a paso, y entendemos que él con su gran fuerza nos está ayudando, cualquier método que estemos haciendo, nuestro pensamiento tiene que estar ligado con el Buda Sakyamuni o Avalokitesvara o Amitofo.

Por eso pronunciar el nombre del Buda, no es simplemente pronunciar, sino que el verdadero sentido de recitar el nombre del Buda es: estar consciente de que los 48.000 métodos están relacionados con el Buda. Y que no necesariamente por pronunciar el nombre del Buda uno está practicando para ir a Tierra Pura.

Para reencarnar en  Tierra Pura es necesario que haya confianza en Amitabha Buda y en la verdadera recitación del su nombre.

Hoy llegamos hasta aquí y hago una conclusión: realmente podemos decir que el karma negativo que tenemos es inconmensurable como las arenas del río. Y ¿podemos recitando el nombre del Buda eliminar todo mal karma? La respuesta es que es cierto.

Ya hemos explicado la teoría al respecto y ahora esperamos que ustedes tengan la fe en ella y se pongan a practicar.

                            

                                             Amitofo